MADRID. Markus Mueller-Trapet, del Consejo Nacional de Investigación de Canadá, ha descrito una serie de experimentos diseñados para simular y medir la molestia experimentada por tener un vecino ruidoso. Según el investigador, la exposición a largo plazo a esos sonidos no deseados puede provocar problemas cardiovasculares y trastornos del sueño.
La mayoría de las personas han sufrido a causa de un vecino ruidoso. Ya sea por el pisoteo constante de los pies o el ruido al dejar caer algo, estos sonidos, conocidos como sonidos de impacto, son una de las principales causas de quejas en edificios residenciales y pueden afectar negativamente la salud y el trabajo de los habitantes.
Con el aumento de la densidad de población de las áreas urbanas en las últimas décadas y el aumento del trabajo desde casa a principios de 2020, este investigador cree que el tema se ha vuelto aún más relevante.
Mueller-Trapet y un equipo internacional de investigadores querían encontrar la conexión entre las mediciones de laboratorio estandarizadas y la molestia percibida de un sonido de fuentes de impacto.
Proporcionaron una situación similar a la de una sala de estar y grabaron sonidos de impacto de objetos cayendo y personas caminando. Usando diferentes técnicas de reproducción y realidad virtual, presentaron las grabaciones a los participantes del estudio. Además de los experimentos de laboratorio, el grupo creó una encuesta 'on line' para ampliar su muestra. La encuesta se realizará desde el 21 de noviembre de 2022 hasta el 31 de marzo de 2023.
Los sonidos de impacto son impulsivos, lo que significa que consisten en uno o más sonidos casi distintos de corta duración. Es probable que esto haga que los sonidos de impacto sean más molestos en general que los sonidos continuos, como la música o el habla.
Los resultados sugieren que los ruidos sordos creados por las personas que caminan descalzas no son capturados por las métricas de rendimiento estandarizadas actuales que se utilizan en los códigos de construcción. El desafío que enfrenta el equipo de investigación es integrar esta nueva información con las métricas existentes.
Al continuar con este trabajo, el equipo espera brindar orientación a los arquitectos y desarrolladores de códigos de construcción y avanzar hacia un entorno construido más habitable.