MURCIA. La confitería-cafetería Víctor, situada en la calle Mayor de El Palmar, ha creado un dulce en honor del vecino más famoso de la pedanía, el tenista Carlos Alcaraz, quien además es un cliente habitual de la misma cuando está por su tierra. Así lo cuenta a Murcia Plaza su propietario Víctor Manuel Moreno, quien señala que aunque el nombre con el que él lo ha bautizado-y que está pensando en patentar- es 'Los cojones de El Palmar', muchos clientes lo piden como 'Los cojones de Alcaraz', 'pelotas' o directamente como un 'Carlitos'.
El nombre, explica, viene de la ya famosa frase del abuelo del tenista, que le aconsejó que para manejarse por la vida y en las pistas había que tener "cabeza, corazón y cojones". Algo de lo que el palmareño ha hecho gala, llegando a ser número uno del mundo.
El dulce en cuestión, que llevan vendiendo desde el pasado mes de mayo, consiste en una berlina frita rellena de crema o chocolate (hay dos tipos), bañada en chocolate y rebozada en fideos de chocolates, lo que le da mayor 'realismo'. "Queríamos hacer un dulce que se pudiera tomar en cualquier hora del día, para desayunar, almorzar o merendar", cuenta Víctor, quien asegura que está siendo todo un éxito y lo han incorporado a su catálogo de productos. Prueba de ello es que el pasado domingo y en un solo día vendieron unas 250 piezas.
Señala el regente de este establecimiento, que lleva 35 años abierto en El Palmar, que Carlos Alcaraz pasaba antes mucho por allí, sentándose en la terraza con sus amigos. La última vez que los visitó no quedaban los dulces en su honor, por lo que Víctor espera que en la siguiente ocasión pueda obsequiarle con una bandeja para él y su familia.