MADRID. (EP) El Consejo de Ministros ha aprobado este jueves un Real-Decreto de medidas que prevé destinar 2.190 millones de euros para afrontar la sequía y aumentar la disponibilidad de agua, de los cuales el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico aportará 1.400 millones.
Las actuaciones de este departamento para hacer frente para la sequía prevén duplicar de aquí a 2027 el uso de agua reutilizada que en la actualidad es del 10 por ciento, según ha explicado la vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros extraordinario dedicado a la medidas contra la sequía.
La vicepresidenta ha constatado que la situación "más sensible y delicada" está en las cuencas del Guadalquivir, las cuencas internas andaluzas, las cuencas internas de Cataluña, al tiempo que las de Guadiana, Júcar y Segura "requieren vigilancia especial".
Además, ha precisado otras actuaciones diseñadas por su departamento que incluyen la reducción de los cánones y las tarifas de las explotaciones agrarias afectadas, así como un precio fijo para el agua desalada para que los agricultores puedan utilizarla a un precio asequible.
Entre las medidas aprobadas, ha destacado el trasvase de 3 hectómetros cúbicos del Tinto y el Odiel para reducir la presión sobre los acuíferos que alimentan el Parque Nacional de Doñana, en particular en el entorno de Matalascañas.
Para la ministra, este paquete de medidas llega para actualizar las "reflexiones" que han motivado el trabajo del Gobierno en estos cinco años para una España acostumbrada a periodos de sequía pero que está sufriéndolas con una incidencia "mucho mayor" y con efectos que hay que afrontar con toda la capacidad técnica que España ha ido desarrollando en estos años desde la declaración de emergencia climática.
Por un lado, ha indicado que las medidas extraordinarias aprobadas este jueves son de corto plazo y "auxilio inmediato" pero que forman parte de una "anticipación" de medidas porque "lo que ocurre hoy no es una novedad".
La vicepresidenta ha mencionado a "algunos" que piden un "pacto nacional del agua" a quienes recuerda que "ese pacto existe" y se llaman planes hidrológicos del agua, en los que se ha trabajado durante los últimos cuatro años y que orientarán las decisiones en materia de agua para estar preparados para esos escenarios.
En concreto, se ha referido a la petición del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, que pide un pacto nacional del agua y que ha propuesto destinar 50.000 millones de euros a la gestión de este recurso hídrico. Ribera ha manifestado que cuando oye su petición entiende que lo que quiere Feijóo es derogar los planes hidrológicos que ya existen después de cuatro años de trabajo y que tienen en cuenta los distintos escenarios climáticos, que se han realizado con intenso trabajo técnico y científico y que cuentan con el aval mayoritario en todas las cuencas en todos los casos excepto, "por la mínima", en el plan hidrológico del Duero.
En ese contexto, ha destacado la colaboración con las distintas comunidades autónomas y confederaciones hidrográficas como por ejemplo Andalucía, con la que desde diciembre ha mantenido seis reuniones.
"Es un trabajo que no entiendo bien a quien se quiere echar. Quieren echar los planes hidrológicos que son realistas", se pregunta la vicepresidenta que ha defendido que la aprobación de los planes hidrológicos son una "batalla" que beneficia al conjunto del país.
Sobre la propuesta por el líder popular de destinar 50.000 millones de euros al agua, Ribera no sabe de dónde se saca la cifra ni qué cambiaría o qué echa de menos en la gestión hídrica. "Esta es una respuesta responsable por nuestra parte respaldar el trabajo de cuatro años y rechazamos que alguien solicite que eso se derogue o les explicamos que sea es la legalidad vigente en este momento", ha defendido.
En todo caso, para Ribera no basta con ofertar más agua sino que es preciso gestionar bien la demanda, mejorar los aspectos de calidad y disponibilidad para lo que el Ministerio ha completado el marco regulatorio, entre otros aspectos para poder garantizar la calidad del agua reutilizada que en este momento llega a un uso del 10 por ciento y que espera pasar hasta el 20 por ciento; de los 400 hectómetros a cerca de 1.000 hectómetros en 2027.
Asimismo, de los 1.400 millones de euros de inversiones, se destinarán 35,5 millones a actuaciones inmediatas para garantizar el abastecimiento este año. "Este Gobierno quiere acompañar al sector primario y en particular en lo que depende de las comunidades autónomas y, en particular, acompañar a los regantes", ha señalado Ribera, que ha mostrado su voluntad de que "más allá de la lectura de las competencias" del Estado y de las comunidades autónomas poder acompañar a quien les ha pedido apoyo.
Esa cuantía de 35,5 millones de euros incluye la aceleración de la construcción de infraestructuras, algunas de carácter inmediato para las cuencas afectadas pro sequía, tales como bombeos de emergencia o adecuar tomas para garantizar el abastecimiento durante los próximos meses.
Asimismo, en ese ámbito, se ha declarado de interés general varias actuaciones en la costa mediterránea por lo tanto el Estado asumirá la construcción de desalinizadoras en Cataluña, Málaga y Almería. Una de ellas en Tordera (Barcelona), con un coste de 220 millones y otras dos en Málaga y Almería, que costarán unos 200 millones; y se intensificará la reutilización en Alicante con una inversión de 224 millones de euros.
La vicepresidenta ha explicado que se ha autorizado a la Sociedad Estatal de Aguas de las Cencas Mediterráneas (Acuamed) para que comience a licitar la construcción de nuevas plantas desalinizadoras alimentadas por parques solares fotovoltaicos, en el marco de su segundo Convenio de Gestión Directa, que cuenta con una dotación económica de 600 millones.
Entre las medidas citadas para ayudar a los regantes, este 2023 se les aplicará una exención al canon de regulación y a la tarifa de utilización del agua. Esta exención será del 50% si el descenso de la dotación es del 40% al 60%, y del 100% si supera ese 60%. Los beneficiarios indirectos de las obras de regulación de la cuenca del Guadalquivir quedan directamente exentos del 50% de dichas cuotas.
Por otro lado, el Gobierno ha acordado que el Estado sumirá las obras para acometer un trasvase en Doñana y abastecer a Matalascañas, con la sustitución de los bombeos de agua subterránea que abastecen a la conurbación de Matalascañas por aguas superficiales procedentes de la estación potabilizadora de Palos -Cuenca del Tinto, Odiel y Piedras-, así como la transferencia de 3 Hm3 anuales.
En todo caso, Ribera ha señalado que el Gobierno seguirá trabajando con las comunidades autónomas y las comunidades de usuarios para analizar los distintos escenarios de sequía para mejorar la respuesta estructural "e imprescindible" como las inmediatas que hay que abordar este verano.
El Gobierno no convocará una Conferencia de Presidentes por la sequía en periodo electoral, según ha confirmado la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de ministros extraordinario para aprobar medidas sobre esta cuestión.
Así, ha asegurado que tanto en materia de sequía como en materia de agua e infraestructuras relacionadas el Gobierno ha estado dialogando "permanentemente a lo largo de toda la legislatura".
De ese modo, ha justificado que el Gobierno no vaya a convocar una Conferencia de Presidentes solicitada por algunos dirigentes autonómicos precisamente en periodo electoral que "no es el más apropiado para realizar este tipo de encuentros" que se basan en el acuerdo previo.
"Nunca antes, en periodo electoral, se había celebrado una Conferencia de Presidentes. Parece razonable porque algunos de estos presidentes están concurriendo en estos momentos a unas elecciones autonómicas y por tanto, tanto sus deseos como sus propuestas se entienden en esta línea", considera.