CARTAGENA. "Queremos pedirte, por el bien de todos, que te busques otra vivienda mientras dura esto, ya que hemos visto que trabajas en un supermercado y aquí vivimos muchas personas. No queremos más riesgos". Esto es lo que se encontró tras la puerta de su casa Miriam Armero, una joven cartagenera que ha subido a las redes sociales la mala experiencia que ha tenido que vivir, fruto de la crueldad y la insolidaridad que también está dejando el virus entre los seres humanos.
Armero cuenta en un video, que se ha hecho viral, cómo algún vecino, que se amparó en el anonimato, le metió debajo de la puerta esa nota. Cuenta Armero que fue su hijo quien la leyó y que "no dejó de llorar al pensar que nos iban a echar de casa".
"Me parece cobarde lo que han hecho" dice en el video la joven trabajadora, quien añade que "quien tenga algún problema que venga a mi casa que le contestaré. La gente no se da cuenta que los que trabajamos en un supermercado también estamos en riesgo de contagiarnos nosotros y a nuestras familias. Soy muy consciente de lo que tengo que hacer y nadie me va a venir a darme lecciones".
Ha decidido poner la denuncia a la Comunidad de Propietarios por lo que podría tratarse de un caso de acoso a una vecina y en la nota que ha colocado en la escalera dice que "no me teneis que ir dando lecciones cuando soy la primera que cuando llega a casa y no puedo darles un beso a mis hijos hasta que no me he limpiado y desinfectado".
Añade Armero que en otra ocasión que salgan a los balcones a hacer palmas tengan "más empatía por las personas que tenemos que trabajar y tenemos familia".
