CARTAGENA. El submarino S81 Isaac Peral ha sido trasladado al dique seco de Navantia para proceder a su segunda varada programada, antes de la entrega del buque a la Armada, prevista para primavera de 2023. El sumergible permanecerá en seco hasta finales de agosto; durante este periodo se realizarán ajustes y nuevas pruebas a bordo tras completar 3 tres salidas a la mar.
Navantia ha permitido a la Armada doce días de adiestramiento, principalmente pruebas de propulsión y maniobrabilidad. Esta última semana ha salido dos veces y según el capitán de Navío, Juan Manuel Torrijos, comandante de pruebas del S-81 se han probado máquinas y timones. Confirmaba, además, la entrada en varada y después empezarán con las inmersiones. La estática se hará en la Algameca Chica para ver cómo está de estabilidad la nave submarina y a partir de entonces podremos hacer inmersión hasta la entrega.
"El submarino es un sistema de sistemas y es fundamental comprobar el correcto funcionamiento de todos ellos y su integración. Esta primera navegación ha permitido confirmar el excelente nivel de integración y de prestaciones. Para todos los que trabajamos en este proyecto, constatar el cumplimiento de los distintos hitos es un orgullo y un incentivo para seguir avanzando en este desafío tecnológico", declaraba días atrás el director del Negocio de Submarinos y Programa S-80, Germán Romero Valiente.
Con el desarrollo de este programa, Navantia se convierte en autoridad técnica de diseño y España se sitúa en el reducido grupo de países que tienen capacidad de diseño, construcción y mantenimiento de submarinos.
