CARTAGENA. Cables arrancados, cristales apedreados, puertas rotas, suciedad y pintadas: ese es el panorama que se han encontrado en el Museo del Vidrio de Cartagena y que ha obligado a sus rectores a suspender las visitas previstas hasta que Infraestructuras valore y arregle los graves desperfectos que han ocasionado los actos vandálicos sufridos estas pasadas fiestas navideñas.
Han sido los propios artesanos del museo los que han denunciado la situación en las redes sociales. "Empezamos a recibir estas acciones deleznables a principio de Navidad; acciones que no le hacen bien a nadie, sólo es el hecho de romper por romper y hacer el mal", explican. Tras estos hechos, informaron de la situación a las autoridades políticas y les han pedido que instalen medios de seguridad que frenaran o disuadieran estas roturas "pero no se ha hecho absolutamente nada", añaden. "Llevamos años pidiendo que nos instalen cámaras y se cierre la puerta del patio exterior lo que frenaría todo esto y no se ha hecho", reclaman los artesanos
Todo esto repercute en que más de 20 colegios no podrán acudir al centro en las próximas semanas, ya que se han suspendido las visitas hasta que no se arreglen los graves daños y además se pueda evitar que no vuelvan a entrar de nuevo. "Los escolares no podrán ver cómo se trabaja el vidrio y no conocer la historia tan importante que tuvo la fábrica del vidrio se Santa Lucía", añaden.
Hace tan solo un año, el Ayuntamiento de Cartagena, conjuntamente con la Comunidad Autónoma cofinanciaban un nuevo horno con el que sustituir el anterior horno de gas por uno totalmente eléctrico, que ya no genera ningún tipo de emisiones a la atmósfera, además de ser un equipo mucho más seguro para los maestros artesanos.
En concreto, la Comunidad aportó 18.000 euros a través de una subvención para asociaciones artesanas y el Ayuntamiento de Cartagena contribuyó con otros 5.700 euros.