CARTAGENA (EFE). El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones en funciones, José Luis Escrivá, ha cifrado entre 5.000 y 6.000 los migrantes que han trasladado en las últimas semanas desde Canarias a la península para descongestionar los centros de primera acogida en el archipiélago ante las incesantes llegadas de cayucos a las islas y ha informado de que se montará un campamento temporal en el antiguo hospital naval de Cartagena, a lo se oponen el ayuntamiento, la patronal y la federación de asociaciones de vecinos comarcal y la Cámara de Comercio. Según indicaba el diario La Verdad, serán trescientos los inmigrantes que permanecerán a lo largo de un mes en dichas instalaciones, en las que se montarán tiendas de campaña y contenedores modulares.
El pleno municipal ha apoyado una moción del PP de rechazo a la iniciativa y a la posibilidad de ubicar un segundo Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) en la ciudad, con los votos favorables además de Vox y Movimiento Ciudadano (MC), en contra del PSOE y la abstención de Cartagena Sí.
Al respecto, no ha salido adelante la moción de MC para el alejamiento del CATE de núcleos de población o su traslado a Murcia, lo que apoya Sí Cartagena.
Las otras entidades entienden que Cartagena "sufre ya una presión migratoria excesiva desde hace años para la que la ciudad tiene medios insuficientes", por lo que piden que se busque "un emplazamiento que reúna mejores condiciones" y "mayor solidaridad de los municipios y comunidades vecinas y el apoyo del Gobierno murciano para lograr una salida consensuada al problema para que Cartagena no soporte todo el peso".
Creen necesario que los migrantes "reciban el trato que merecen y en condiciones humanitarias, algo que en las actuales circunstancias se hace muy difícil debido a la falta de recursos e infraestructuras".
En declaraciones a los periodistas tras asistir al acto de presentación de los embajadores olímpicos de los centros de refugiados, el ministro ha subrayado que en estos momentos hay 13.000 migrantes en la red de acogida estatal: 6.000 en las islas y 7.000 en la península, aunque "no todos vienen de Canarias", ha precisado.
La crisis migratoria que atraviesa el archipiélago, donde solo este mes de octubre han arribado más de 13.000 personas, ha hecho que Migraciones agilice los traslados a la península de los migrantes que llegan para liberar los recursos de las islas y que busquen nuevos emplazamientos -varios en terrenos y cuarteles en desuso cedidos por Defensa- para alojar a estas personas.
"Tenemos una gestión integral, es decir, tenemos toda una red de centros de acogida, algunos contingentes y, según las situaciones, vamos viendo dónde es la mejor ubicación, también en función de los perfiles de las personas que van llegando", ha explicado Escrivá.
Entre los emplazamientos que ya están acondicionándose para esa acogida, el ministro ha confirmado que junto a los que instalarán en el acuartelamiento General Arteaga en el madrileño barrio de Carabanchel y en un cuartel sin uso militar en Alcalá de Henares (Madrid), se montarán campamentos temporales en un antiguo hospital militar en Cartagena y en Sevilla.
"Tenemos planes contingentes que vamos desplegando por si la situación requiere una mayor acogida puntual, pero no debemos hablar de cifras concretas porque es muy difícil anticipar las personas que van a llegar", ha añadido.
Escrivá ha remarcado que la acogida de las personas migrantes que llegan a Canarias tienen una "dimensión mucho menor" que la que el Gobierno prestó a los refugiadas ucranianos porque en esa ocasión se concedió protección temporal (permiso de trabajo y residencia) a 200.000 personas.
"Lo que ha pasado esta vez es que, desafortunadamente, se está intentando hacer una utilización xenófoba y política oportunista con este asunto", ha opinado el ministro, que ha insistido en que "se está haciendo una amplificación artificial de algo que es relativamente manejable y natural".
Ha reprochado las críticas vertidas por distintos ayuntamientos y gobiernos autonómicos del PP sobre la falta de información de los traslados de migrantes a la península y ha calificado de "xenofobia" algunos de los comentarios realizados por dirigentes populares.
"España es un país que lleva años gestionando crisis, porque tenemos la geografía que tenemos, con una solvencia y naturalidad notable. Somos una referencia internacional y esta vez es igual que todas y lo estamos haciendo con mucha tranquilidad", ha dicho Escrivá, que ha recalcado la "utilización oportunista de episodios como este para exacerbar instintos xenófobos".
Sobre la falta de comunicación sobre los traslados, el ministro ha afirmado que "siempre" se informa a las autoridades locales y autonómicas una vez el emplazamiento está "perfectamente identificado y van a llegar allí".