CARTAGENA. El Buque de Investigación Oceanográfica Hespérides ha arrancado sus motores para partir en unos días -la fecha prevista es este próximo jueves- rumbo a la Antártida en lo que será su vigésimo sexta campaña. La singladura, tal y como los efectivos de la expedición advierten, está a punto de comenzar y el reto es nutrir de material las bases antárticas españolas y llevar a cabo un buen ramillete de proyectos científicos con intervención de investigadores y universidades.
La dotación del Hespérides está formada por 11 oficiales, 12 suboficiales y 37 cabos y marineros, además de poder alojar hasta 37 científicos y técnicos.
¡Ya estamos casi listos!
— Armada Española (@Armada_esp) December 9, 2021
El #A33Hespérides finaliza la carga de material para las Bases Antárticas ???????? @EjercitoTierra y proyectos científicos programados ????.
Deseando iniciar la #Singladura de la XXVI Campaña Antártica el próximo 16 de diciembre.#SomosLaArmada????????⚓️ pic.twitter.com/Wko6SOe6EG
Estos días previos son vertiginosos con el trasiego de carga de material y suministros, pero con la máxima cautela de su dotación para evitar contactos que puedan suponer infección por coronavirus. Y es que, recordemos, el pasado 13 de enero, el Ministerio de Ciencia e Innovación decidía cancelar la participación del Hespérides, que había partido a finales de diciembre de 2020 del Puerto de Cartagena, en la campaña Antártica Española para evitar cualquier riesgo de propagación del virus entre el personal participante en la campaña y su posible introducción en la zona del Tratado Antártico.
Esta decisión se tomó tras detectarse 35 positivos de la covid-19 -el 60% de la tripulación- en el buque oceanográfico, que se encontraba en Las Palmas de Gran Canaria con toda la dotación en cuarentena.
La fatal consecuencia llegó en febrero, con el fallecimiento del sargento primero de la Armada Francisco Rodríguez Sanchez, tripulante del buque, quien moría como consecuencia del coronavirus.
Aunque desde la Armada no se ha facilitado información alguna de las fechas de finalización y los protocolos a seguir, sí que se ha desvelado por otros medios, en este caso La Verdad, que la dotación permanecerá en el barco sin salir en las diferentes escalas que se hagan en los puertos hasta el mes de abril, para evitar el contacto con el exterior y la posible infección desde fuera.
El buque salía hace tan solo unas semanas de los talleres de Navantia, donde había permanecido desde comienzos de verano, sometido a diferentes servicios de mantenimiento, entre ellos el rebobinado de los motores eléctricos principales del buque, que ejecutó la empresa vizcaína Indar.
El buque es el único buque español diseñado para efectuar investigación científica multidisciplinar en todos los mares y océanos del planeta, inclusive la Zonas Árticas y Antárticas durante los veranos boreales y australes respectivamente. Es, de hecho, el primer buque español que ha realizado Campañas Científicas en ambos Océanos Glaciales, hito acaecido en el verano del año 2007, cuando, auspiciado por la ONU, se celebró el Año Polar Internacional y se llevó a cabo la primera Campaña en el Ártico.
La actividad principal del buque se centra en los veranos australes, durante los cuales realiza campañas científicas en la Antártida y proporciona el soporte logístico necesario a las dotaciones de las Bases Antárticas Españolas (BAE) "Juan Carlos I" y "Gabriel de Castilla", proporcionando combustible, material para el funcionamiento vital de las instalaciones, y víveres necesarios en las distintas escalas programadas.
El Buque emplea cerca de un mes en alcanzar las costas antárticas desde su Base en el Arsenal de Cartagena, aprovechando habitualmente para efectuar durante el tránsito alguna campaña científica, y es asiduo visitante a puertos de países de América del Sur y Central como Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Santo Domingo o Uruguay.
