MURCIA. Los festivales de música son un filón para el llamado turismo cultural. Atraen más del 15% de los visitantes y generan un impacto económico en la Región de más de 25 millones de euros. Siempre y cuando no se meta por medio una pandemia como la del covid-19, que sólo en 2020 provocó que se dejaran de ingresar cinco millones de euros por las suspensiones y cancelaciones que se llevaron a cabo.
De ello es consciente la Consejería de Turismo, que ha apostado por los grandes eventos musicales para atraer a turistas a la Región de Murcia. Prueba de ello es la creación por parte de la Comunidad de la marca 'Festivales de la Región de Murcia, Más Música', que unifica una oferta que constituye el motor de un producto turístico muy rentable dada la elevada inversión que se realiza durante esos días por parte del turista.
El Warm Up, la Mar de Músicas, el Cante de las Minas... y otros que están por llegar como el Rock Imperium, son algunos de estos festivales que, junto al patrimonio histórico y artístico y el Año Jubilar de Caravaca de la Cruz formarán los tres pilares fundamentales sobre los que la Región de Murcia basa su estrategia para promocionar el turismo cultural, esencial para avanzar en la desestacionalización, generar puestos de trabajo y fomentar la internacionalización del destino, dado que atrae asistentes más allá del público regional y nacional.
Así lo ha anunciado el consejero de Turismo, Marcos Ortuño, en su intervención en la cumbre mundial sobre el turismo que se celebra en Barcelona. Durante su intervención, expuso "cómo contribuye la cultura a generar experiencias únicas y se convierte en atractivo para la promoción exterior".
En cuanto al patrimonio cultural e histórico, el consejero destacó especialmente el potencial turístico de Murcia, Cartagena y Lorca, mientras que Caravaca de la Cruz, que representa una de las cinco ciudades santas de la cristiandad y es el máximo exponente del turismo religioso de la Región, se prepara para atraer a un millón de peregrinos en 2024 con motivo del Año Jubilar.
La cumbre mundial sobre el futuro del turismo después de la covid-19 pretende identificar soluciones para la industria turística y establecer un fuerte liderazgo para aplicarlas. Cuenta con más de un centenar de ponentes nacionales e internacionales, entre los que se encuentra el consejero de Presidencia, Turismo y Deportes, y en ella se aborda los principales retos del sector, como la transformación hacia un modelo turístico más sostenible.
