El Chat GPT murciano usa la inteligencia artificial para dar una nueva voz a la pyme española

MURCIA. El Chat GPT promete inundarlo todo, desde la enseñanza hasta el arte, pasando por todas las etapas de la vida cotidiana. Y gracias a la startup Chat Ergo Bot, esta tecnología también llegará a las pequeñas y medianas empresas españolas con el objetivo de dar voz a sus páginas webs.

Y es que la firma, de la que dos de sus tres fundadores son molinenses, ha empleado la inteligencia artificial para crear una solución innovadora en el mercado de los chatbots que combina entrenamiento automático, conversión instantánea de sitios web en conversaciones y accesibilidad para empresas de todos los tamaños.

"Si alguien se pone a construir un chatbot con otras plataformas como no tengas un conocimiento técnico y tiempo para alimentarlo es bastante imposible de hacer. Esta tecnología es como un niño pequeño al que hay que enseñarle y dedicarle muchas horas, y la pyme no tiene recursos para hacer esto", explica Ibán Ríos, CEO y Cofundador de Chat Ergo Bot.

Al fin y al cabo, esta tecnología tiene que aprender la respuesta que tiene que dar ante cada pregunta y ser capaz de reconocer las diferentes fórmulas que usarán los clientes para formular esas cuestiones. Por tanto, esta startup ha implementado la tecnología de Chat GPT para que sea capaz de responder con el contenido de la pagina web mediante un entrenamiento automático.

Esta solución está teniendo una gran acogida en dos nichos que pueden sacar un gran rendimiento a sus usos, como son las ONGs y los veterinarios. Al fin y al cabo, a las primeras accede mucha gente que encuentra más intuitivo el chatbot que la navegación web, mientras que el primero cumple la función de solventar dudas fuera del horario laboral y de agilizar las consultas al formular las preguntas de rigor para analizar el estado del animal.

Por el momento, esta empresa está enfocada en su crecimiento, que en estos momentos están impulsando con la entrada a la aceleradora de empresas de Juan Roig: "Entramos en enero a Lanzadera en un programa que dura ocho meses. Desde entonces hemos visto un aumento en la captación de clientes y tenemos una mayor difusión, que también nos ayuda mucho", incide Ríos.

Por el momento, la compañía está financiada por los tres fundadores, aunque ya está encima de la mesa la posibilidad de abrir una ronda de financiación para continuar con el escalado y alcanzar la base de pymes a las que pretende llegar. No obstante, este proceso aún está en fase inicial y aún queda mucho por decidir antes de comenzar la búsqueda de socios.