Inmigrantes en Cartagena el pasado año. Foto: LA ROCA
CARTAGENA. Cuando José Vélez, delegado del gobierno de Murcia, visitaba a comienzos del mes de junio las instalaciones donde se ha iniciado la construcción del Centro de Acogida Temporal de Extranjeros, la noticia pasó más bien desapercibida. Pero una vez que las máquinas han entrado en el lugar, las reacciones no se han hecho esperar. Hemos pasado del escepticismo de que sería una obra que nunca llegaría a hacerse, a la negación en unos días. Los partidos políticos y también los grupos vecinales han mostrado su oposición al traslado a esta zona -junto al Espalmador y en el antiguo muelle del Carbón- de una instalación que a pesar de ser temporal, el Estado ha decidido invertir 3,8 millones de euros.
Tanto la alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, como la presidenta de la Autoridad Portuaria, Yolanda Muñoz, han sido preguntadas en los últimos días por este asunto y han tratado de pasar de puntillas sobre el mismo apelando a la "temporalidad" de las instalaciones y a la creencia, así lo transmiten, que no será definitiva.
La propia Arroyo explicaba hace tan solo unos días en el diario La Verdad que cuando preguntó al delegado de gobierno sobre el tema "encontré receptividad y me trasladaron que va a ser provisional".
Por su parte, Yolanda Muñoz, la dirigente de la APC, explicaba sobre la provisionalidad o no de dicha instalación y los problemas que puede ocasionar esta infraestructura en los planes de expansión del ocio y entretenimiento que había prometido el Puerto en esa zona.
La presidenta del puerto indicaba que cuando Defensa autoriza a la Delegación de Gobierno la instalación del Cate de forma definitiva, "es la alcaldesa la que pide que sea provisional, porque se queda pegada al desarrollo de uso para la ciudad, y que se traslade a la parte norte (donde están ubicados los almacenes de la Armada)". Allí, informa Muñoz, quedará albergado dentro de las instalaciones de seguridad portuaria (Cruz Roja, Salvamento Marítimo, Guardia Civil del Mar). "En el lateral más esquinado y alejado" a los posibles y futuros usos de la ciudad "casi apenas se van a ver y se van a notar", subrayó la mandataria.
"Garantiza la seguridad de los inmigrantes y de todas las organizaciones que trabajan para el bien de los inmigrantes y la seguridad de cartageneros y visitantes. Está perfectamente dirigido y coordinado", añadía la presidenta para tratar de arrojar algo de luz a un asunto que no para de enroscarse cada día un poco más.
"Estamos haciendo una planificación, junto con el Ayuntamiento, con una viabilidad técnica, económica y social para definir todos los usos del Espalmador. Este es un espacio de 78.000 metros cuadrados donde habrá usos portuarios y ciudad. Además, también en los usos concretos de seguridad de la Armada", por lo que se desmantelarán los tanques que allí se encuentran y se ubicará definitivamente el Cate.
Desde la Federación de Asociaciones de Vecinos de Cartagena también se han pronunciado y su presidente, Leandro Sánchez, admitía a Murcia Plaza que en esta zona "había un proyecto para desarrollar una zona de ocio y nosotros queremos que se desarrolle ese proyecto", a la vez que recordaba una vieja reivindicación de la FAVCAC "nosotros pedimos que se hiciera en el Espalmador una playa urbana", una propuesta que desde la APC nunca se ha dado como definitivamente descartada.
Las instalaciones del Cate contarán con 38 módulos para los inmigrantes, ocho para instalaciones policiales y capacidad para más de 300 casetas.
