CARTAGENA. El alcalde de La Unión ha alertado sobre la posibilidad de que la regeneración de la Bahía de Portmán termine reduciéndose a un simple sellado. "Es la amenaza que percibimos desde el Ministerio para la Transición Ecológica, que además paralizó este proyecto en el año 2018 y desde entonces está detenido", señaló Joaquín Zapata.
Zapata insistió en que, desde el año 2004, cuando se firmó el pacto de regeneración en el que todas las administraciones implicadas acordaron que "lo que había que hacer con la Bahía de Portmán era regenerarla", el único avance significativo fue el proyecto iniciado en 2016, que el Gobierno de España paralizó en 2018. "Ahora tenemos el peligro real de que pueda no regenerarse y que termine siendo sellada", advirtió.
Frente a este riesgo, el Ayuntamiento de La Unión lleva tiempo liderando las reivindicaciones. Este jueves, la Confederación Comarcal de Organizaciones Empresariales de Cartagena (COEC) decidió adherirse a la comisión de seguimiento de la regeneración. "Su apoyo es también una manera de decirle al Gobierno de España que se ha quedado solo. Todos los colectivos vecinales, organizaciones empresariales, ecologistas y, por supuesto, las administraciones, estamos exigiendo la regeneración de la bahía de Portmán, entendida como la recuperación de su forma de herradura", subrayó Zapata.
El alcalde añadía que las sospechas llegan porque el propio estudio de alternativas señaló como opción más favorable la que implicaba el sellado. "Entendemos que eso no es casualidad, que responde a instrucciones del propio Ministerio, que es quien contrató el proyecto de alternativas". Y por otro lado, aunque el secretario de Estado, Hugo Morán, "nos dijo en reiteradas ocasiones que la cuestión económica no iba a ser un problema, sí que estamos viendo que la cuestión económica es el principal problema, porque si no hubiera un óbice económico, ya habrían dado el siguiente paso, que es encargar la reacción del proyecto, y solamente con la alternativa 3B, que es la única que contempla la recuperación de la forma de bahía".
Y de cuánto dinero estamos hablando para decantarse por regeneración o sellado, Zapata añade: "Son horquillas de precio las que se fijaban en el estudio de alternativas, pero son varios centenares de millones de euros la diferencia", e insiste: en que los estériles "tienen que salir de la bahía, porque del mismo modo que llegaron, y llegaron además con una autorización del propio Gobierno de España, deben de salir de allí. Primero por una cuestión de justicia ambiental. Aquello que se contaminó debe descontaminarse, además está en los principios fundamentales de la normativa europea, eso debe ser así. Y en segundo lugar, porque de lo contrario habremos convertido un paraíso natural en un lugar que ahora mismo es ruina y desolación".
La firma del acuerdo entre la presidenta de la COEC, Ana Correa Medina, y el alcalde de La Unión, Joaquín Zapata, tuvo lugar en la sede de la patronal, tras una visita a las inmediaciones de la playa del Lastre y la Bahía de Portmán. Los acompañó Carlos Bernabé, presidente de la Federación de Asociaciones de Empresarios Profesionales de La Unión (FAEPU) y vicepresidente de COEC.
El convenio original, firmado en 2006, definía las responsabilidades de las distintas administraciones implicadas: el Gobierno de España asumiría la regeneración ambiental; el Gobierno de la Región de Murcia construiría un nuevo puerto deportivo y pesquero; y el Ayuntamiento de La Unión se encargaría de diseñar una ordenación territorial para favorecer la recuperación de la Sierra Minera.
Con la firma de hoy, la COEC se une oficialmente a este compromiso, reafirmando la colaboración entre instituciones, colectivos y el tejido empresarial para la recuperación ambiental y económica de la Bahía de Portmán, una actuación imprescindible tanto para La Unión como para toda la Comarca del Campo de Cartagena.
La presidenta de la COEC destacó que "la regeneración de la Bahía de Portmán, junto con la Sierra Minera, es fundamental para el sector turístico de toda la comarca. Su recuperación es imprescindible para abrir nuevas oportunidades de desarrollo económico sostenible, atraer inversiones y generar empleo y riqueza".
"Tanto Europa como España tienen una deuda con la Bahía de Portmán, y su regeneración es un acto de justicia que podemos convertir en un referente ambiental", concluyó Ana Correa.
