MURCIA. Este miércoles no fue un buen día para hacer ejercicio al aire libre, coger el coche para ir al centro o trabajar en la oficina debido a la contaminación atmósférica. El aire en Murcia incumplía los límites de contaminación permitidos. Respiramos aire de mala calidad e insalubre y es algo que ocurre de forma recurrente.
Así lo subraya a Murcia Plaza Pedro Luengo, coordinador de Ecologistas en Acción, después de que el Ayuntamiento de Murcia tuviera que activar el protocolo por contaminación atmosférica en el nivel de aviso al detectar valores de partículas contaminantes PM10, que alcanzaban los 62 microgramos por metro cúbico de aire, cuando el máximo permitido es de 50.
"No somos conscientes de la mala calidad del aire que respiramos en Murcia. Es muy mejorable y deben ponerse en marcha medidas más ambiciosas para revertir esta situación", asegura.
Para los menos técnicos, el PM10 es polvo en suspensión tóxico cargado de partículas cancerígenas que entran en nuestro organismo en cada exhalación. En personas sanas pueden no tener efectos a corto plazo pero incrementan los infartos y las enfermedades cardiovasculares, entre otras patologías, en casos más crónicos.
Luengo señala que el protocolo se ha activado tarde y no es primera vez que se incumple. "Son precavidos de más. Sirve para concienciar a la gente pero no hay medidas contundentes, son todas voluntarias. Así no se arregla el problema".
Las recomendaciones del nivel que se ha activado, el más bajo de los tres posibles, incluyen no acceder al centro de la ciudad en coche, conducir de forma eficiente y utilizar los aparcamientos disuasorios. Algo que, a todas luces, no se siguió ayer a juzgar por la cantidad de tráfico que hubo a lo largo de toda la jornada en el centro y, especialmente, por la tarde.
También señala el protocolo que debe usarse preferentemente el transporte público o desplazarse a pie o en bicicleta, no hacer ejercicio físico al aire libre, trabajar si es posible desde casa y bajar la temperatura de la calefacción, entre otras medidas. Si alguien lo llevo a cabo, es imposible de saber.
"Las recomendaciones que se hacen son insuficientes", recalca Luengo. "Hay que ser más proactivo y poner en marcha medidas más obligatorias y menos opcionales", así como "trabajar en serio sobre la movilidad de los ciudadanos. El transporte público es bastante deficiente. Así no se puede mejorar la calidad de aire”.
Las indicaciones, de hecho, implican para este nivel de contaminación la prohibición de quemas agrícolas, pero Luengo asegura que "se vigilan poco e, incluso en momentos en los que se activa el protocolo, se siguen realizando".
Previsiblemente, el protocolo se mantendrá activado unos días, dependiendo de que las partículas tóxicas que ahora están en el aire en exceso vuelvan a niveles más comedidos. Dependerá en parte de la climatología y en parte de que las recomendaciones se lleven a cabo. Al ser completamente voluntarias, es difícil asegurar su efectividad.
Precisamente esta circunstancia se da días después de las polémicas palabras de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, negando la existencia de muertos por contaminación atmosférica. Sin embargo, en España, más de 10.000 personas mueren por este motivo y siete millones en el mundo, tal y como informó Efe.
Los ministros de Ciencia, Pedro Duque, y de Sanidad, María Luisa Carcedo, recordaron en sus cuentas de Twitter varios informes de organizaciones científicas que recogen la estrecha relación entre la contaminación atmosférica y la muerte de ciudadanos.
La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) señala que en España el 35% de la población respira aire contaminado causante de aproximadamente unas 10.000 muertes al año directamente relacionadas con la contaminación atmosférica, según el Instituto de Salud Carlos III.
Esos datos se corroboran además en el estudio del Banco Mundial "El coste de la contaminación atmosférica. Refuerzo de los argumentos atmosféricos a favor de la acción", publicado en 2016, según el cual en el año 2013 murieron en España por causas asociadas a la contaminación 14.689 personas.