Una de las colas que se formaron en el aeropuerto en la mañana de este jueves.MURCIA. "El aeropuerto de Corvera parecía Barajas de la gente que había. Hasta los halcones que controlan la pista tuvieron que trabajar". Con estas palabras y bromeando definía un trabajador de la terminal lo que pasó en la jornada de este jueves. Y es que los más de 40 vuelos que se desviaron desde la terminal de El Altet de Alicante por el incendio que allí se produjo hicieron que la instalación aeroportuaria murciana registrase su récord de actividad en un día en que estaba previsto que ni se abriese, ya que no había vuelos previstos.
Un año después de su apertura y en el mismo día en que se hacía balance de la gestión, el incendio de la terminal alicantina hizo que el miércoles se empezasen a desviar vuelos, pero fue el jueves cuando, ante la tardanza en la vuelta a la normalidad en el ahora conocido como aeropuerto Elche-Alicante (El Altet), Corvera despegó por fin. Aunque fue por un día y a costa de una desgracia de los vecinos.
La situación era tan extraordinaria que los 11 taxis que normalmente operan en Corvera en temporada baja pasaron a ser 130. Más de una decena de trabajadores de El Altet hicieron su jornada de trabajo en Murcia para reforzar el bar, donde "hubo que reponer tres veces la máquina de bocadillos", así como otros servicios. Y los tranquilos halcones pero efectivos que viven plácidamente en la terminal, que ya es su territorio y que evitan que otros pájaros interrumpan los vuelos e incluso que acaban con los conejos que pueden transitar por la pista, tuvieron trabajo extra.
Los usuarios de las redes sociales no han dejado pasar la oportunidad de comentar que la actividad se ha disparado en la "tranquila terminal murciana" y que ha sido un incendio lo que lo ha provocado. Además muchos se preguntaban si en u futuro Corvera tendrá actividad "de verdad".
Incluso un accidente que hubo el miércoles en una de las rotondas cercanas a la entrada a la terminal desde la autovía, en el que un coche se salió de la vía, "pudo deberse a que el conductor pudo despistarse observando uno de los aviones que aterrizaban a esas horas en Corvera", ya que la salida de la carretera fue muy extraña. Aunque este extremo no está confirmado.
Lo cierto es que Corvera, sin ser Barajas o El Altet, cobra vida y "parece otro" cuando hay actividad. Mientras, el aeródromo espera vivir tiempos mejores y mantendrá sus escasos vuelos semanales. Eso sí, ha demostrado que cuando tiene que hacer de suplente del aeropuerto de Alicante-Elche, hace su función.
