Los transportistas murcianos salen de La Junquera tras soportar pérdidas millonarias  

MURCIA.  Los más de 4.000 camiones que estuvieron bloqueados durante cerca de 32 horas pudieron seguir su marcha después de haber soportado pérdidas millonarias por los cortes que la plataforma Tsunami Democrátic realizaron en la AP-7 a la altura de La Junquera, en la frontera de España con Francia, para mostrar su rechazo de la sentencia del procés, y en medio de las críticas de transportistas y advertencias de empresarios contra la "cronificación" de las protestas.

Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Civil lograron desalojar a los manifestantes que estaban cortando la AP-7 en la frontera con Francia y que amenazaban con prolongar los cortes de carretera hasta el miércoles. Un total de 19 personas fueron detenidas durante el desalojo. Desde primera hora, las fuerzas de seguridad francesa habían comenzado a desalojar a los manifestantes en su lado de la frontera. Tras ser desalojados de la autopista, se habían dirigido al núcleo urbano de La Junquera para bloquear la N-II.

La circulación entre España y Francia por la autopista que pasa por la localidad fronteriza de La Junquera, cortada desde ayer por las protestas convocadas por Tsunami Democràtic, se restableció cerca de las 14:45 horas en ambos sentidos. Las fuerzas de seguridad también lograron despejar el corte de tráfico que había en la carretera N-II en este municipio. Un comunicado de la Prefectura de los Pirineos Orientales confirmaba que la autopista AP-7 en España y A-9 en Francia, había recuperado la normalidad en torno a las 14:30 horas. Poco después, Mossos d'Esquadra y Guardia Civil también lograron que los manifestantes abandonasen la N-II después de que les realizaran varias advertencias a través de megafonía. Sobre las 14:45 horas, consiguieron que se retiraran totalmente para recuperar el tráfico de vehículos.

Han sido horas muy tensas para el sector de los transportistas. El secretario general de la Federación Regional de Organizaciones Empresariales de Transporte de Murcia (Froet), Manuel Pérezcarro, había asegurado que el corte de la autopista AP-7 en la frontera de Francia estaban generando entre 350 y 500 euros diarios a cada uno de los 20.000 camiones bloqueados, por lo que el coste a los transportistas podía llegar hasta los 10 millones de euros al día. Unos 4.000 de estos camiones son murcianos. "Iba a Francia, pero ahora mismo llevo tres horas parado en la N-II de Figueras", contaba uno de los conductores que se encontraba parado. "Salí anoche y llevamos un mes así. Me cuesta ver una solución a esta situación", añadía este conductor.

Pérezcarro calificó como una "tomadura de pelo" que el Servicio de Transportes de la Generalitat les dijera que iban a colaborar para evitar esta situación cuando lo que han hecho ha sido "prevenir" a los CDR para que los manifestantes "estuvieran allí esperándonos". "Nos han engañado", dijo.

Por ello, el secretario general de la patronal del transporte regional pidió al Gobierno central que "actúe ya con seriedad porque esto es de una irresponsabilidad total", añadiendo que en Europa están viendo a España como un "país tercermundista". "Nuestros clientes no entienden que 200 miembros de los CDR puedan cortar los suministros de toda Europa y hemos llegado a un límite que no sabemos lo que puede pasar a partir de ahora si no nos hacen caso", había apuntado durante las horas de bloqueo.

Pérezcarro indicó el daño que este bloqueo ha producido, ya que es ahora cuando empieza la campaña de invierno, una de las más altas del año. "Esto es un desastre e insoportable y lo único que pedimos es la intervención inmediata de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado", rogaba antes de alertar de que los clientes europeos estaban derivando sus compras a mercados "más seguros", como Grecia e Italia.

Finalmente, recordó que las pérdidas no sólo se generan en la mercancía que lleva el camión, que puede perder calidad por el retraso y el posible rechazo por el cliente en la recepción de los productos, sino que se pierde el viaje programado de vuelta.