CARTAGENA. Los certificados de fin de obra subieron un 12% de enero a mayo en comparación con el mismo periodo del año anterior en la Región, según datos del Ministerio de Agenda Urbana. Un hecho que acentúa los problemas de la vivienda, ya que la obra terminada supera a la obra nueva. Si en 2022 fueron 828 los visados de obra terminada de enero a mayo, en 2023 han sido 941. Esta tormenta perfecta, que afecta al mercado inmobiliario desde principios de año, con baja oferta y alta demanda, unida a un aumento del precio de las hipotecas, sigue tensionando el mercado de la vivienda en la Región.
Un ejemplo es que la oferta de pisos compartidos en la ciudad de Murcia se ha incrementado un 67% en el último año, según los datos manejados por el portal inmobiliario Idealista. Un dato que se refuerza con el incremento del precio de este tipo de pisos, que ha subido un 12%, hasta los 280 euros en el último año. La media de edad del usuario que opta por este tipo de alquiler es de 30 años. A esa edad, la mayoría de las personas optan por dejar el hogar familiar tras lograr una estabilidad económica y laboral.
Todo ello lo provoca la escasez de vivienda, que sigue sin encontrar una luz al final del túnel. Los precios del alquiler y de casas en venta siguen sin dar un respiro, a la vez que las hipotecas siguen subiendo ante la subida de tipos del Banco Central Europeo. Esto además se une a la falta de vivienda nueva en la Región, algo que se recrea en muchas otras regiones de España. Según datos del Ministerio de Agenda Urbana, los visados de obra nueva han caído un 9% de enero a mayo, en comparación con el mismo periodo de 2022. Si en 2022 fueron 573 los proyectos de vivienda nueva aprobados, en 2023 han sido tan solo 522. Si en 2022 los problemas de vivienda ya eran evidentes, en 2023 esto se agudiza.
Así, el precio de la vivienda usada en España experimentó una subida del 0,3% durante el mes de julio, situándose en 1.996 euros/m2, según el último índice de precios inmobiliarios de idealista. Este dato es un 7,2% más alto que el del mismo mes del año pasado mientras que se sitúa un 5,6% por debajo del precio máximo histórico de la vivienda en España, registrado en junio de 2007. En la Región, la subida es de un 6,8% respecto a julio de 2022.
La escasez de vivienda también afecta al mercado del alquiler. Según Ferran Font, director de Estudios de pisos.com, "las mensualidades de alquiler siguen subiendo de forma imparable. Es difícil prever el futuro punto de inflexión de las rentas".