CARTAGENA. Desde hoy y hasta el próximo miércoles hasta siete barcos atracarán en Cartagena, lo que supondrá cerca de 15.000 turistas en las calles en este puente festivo. Hoy está prevista una doble escala, Corinthian y Aidastella, aunque lo más espectacular llegará este próximo miércoles, con la triple escala en la que surge como gran protagonista el Wonder Of The Seas, barco de la compañía Royal Caribean, que es calificado como el más grande del mundo. No es nueva su visita a la ciudad, ya que el pasado mes de mayo atracó en el muelle Juan Sebastián de Elcano.
Este mes de noviembre se esperan un total de 26 escalas, el tercero con más barcos turísticos en Cartagena, solo superado por mayo y octubre. No obstante, noviembre será el más destacado en cuanto a número de pasajeros, cuya cifra supera los 40.000 cruceristas, así como tres dobles escalas y dos triples. De los 40.000 pasajeros, 6.000 llegan en el Wonder Of The Seas. Esto supone una media diaria de más de 1.000 personas que llegarán a Cartagena.
Tal y como explicábamos unas líneas más arriba, los primeros son dos habituales hoy, el coqueto Corinthian, que llega con poco más de cien turistas. El barco se caracteriza por ser de clase Premium. El Corinthian; un lujoso crucero de pequeña eslora perteneciente a la naviera Grand Circle Cruise Line. Con capacidad para navegar por la Antártida, sus 100 pasajeros, alojados en 49 camarotes y atendidos por 70 miembros de la tripulación. Junto a él, aquellos que se acerquen por el puerto podrán ver también al Aidastella, un crucero clásico cada temporada en aguas de Cartagena. El buque cuenta con 1.097 camarotes, un área total de restauración de 4.323 metros cuadrados con siete restaurantes o un área total de 6.620 metros cuadrados. Tiene capacidad para 2.700 pasajeros y su tripulación consta de 609 personas.
Este lunes arriba el Star Flyer, en el que sus 170 pasajeros pueden rememorar las navegaciones que hicieron famoso al Capitán Cook y las luchas de los intrépidos navegantes contra la piratería. Ofrece una navegación muy similar a un yate privado. Amplios y cómodos camarotes, dos piscinas, un gran salón comedor de asiento libre, dos bares en los que relajarse y una biblioteca con chimenea.
Para el martes, festivo, doble escala con cerca de 4.500 turistas en la ciudad. Llegan el Norwegian Star y el Riviera. El primero fue botado en 2001 bajo el concepto Freestyle Cruising. Con capacidad para cerca de 3.000 pasajeros, tiene 17 opciones de restauración con menús de cocina asiática, francesa, norteamericana y cuenta con 10 bares y salas. El Riviera, por su parte tiene una capacidad para 1.447 pasajeros. Al igual que su predecesor Marina, fue diseñado para ser diferente. Desde su espléndida escalera Lalique en la recepción, hasta las Owner’s Suites con sus interiores diseñados por Ralph Lauren. Pero donde destaca el buque de 6 estrellas Riviera es en la gastronomía, con seis restaurantes gourmet.
El martes se prepara un gran espectáculo en el agua con la triple escala y la llegada del Celebrity Reflection. Es el más grande de clase Solstice Desde octubre de 2012 es propiedad y está operado por Celebrity Cruises. El barco tiene capacidad para más de 3.609 pasajeros y más de 1.200 tripulantes, más que cualquier otro barco de cruceros de Celebrity. Tiene 317 metros de eslora por 37 de manga, una velocidad de crucero de 24 nudos, el Celebrity Reflection cuenta con 15 cubiertas, 12 de ellas abiertas al público, y dispone de 1.532 cabinas de diferentes categorías (estándar, balcón y suites).
Junto a él podremos ver al Wind Star. El barco cuenta con una capacidad máxima de unos 159 pasajeros distribuidos en espaciosos camarotes, por lo que consigue proporcionar un ambiente de intimidad y exclusividad única. En el interior del barco hay instalaciones modernas y elegantes propias de los yates de la misma compañía, como el Wind Spa, la apasionante plataforma de deportes acuáticos, la zona Lounge, el casino y la biblioteca.
Mención a parte se merece el Wonder Of The Seas, el denominado barco más grande del mundo. Con 362 metros de eslora, 66 metros de manga y 9,3 metros de calado, el Wonder of the Seas, de Royal Caribbean, cuenta con 18 cubiertas, fue construido en el astillero francés de Chantiers de l’Atlantique, en Saint-Nazaire, y tiene capacidad para 6.988 pasajeros y 2.300 tripulantes. El nuevo crucero ha arrebatado a su buque hermano, el Symphony of the Seas, el título de crucero más grande del mundo. El Symphony of the Seas, que también forma parte de la flota de Royal Caribbean, tiene capacidad para 6.680 pasajeros y cuenta con 360 metros de eslora.
Los pasajeros tienen la oportunidad de jugar una partida de 'laser tag' o echar un minigolf, escalar rocas, ver una película en la pantalla de cine junto a la piscina, practicar danza tirolesa, visitar el casino, relajarse en el spa o en el solárium, cantar karaoke, o asistir a una actuación de patinaje sobre hielo, entre muchas otras cosas.
El crucero también tiene una cancha de baloncesto, una piscina para practicar surf, un tiovivo e incluso el tobogán de agua más alto instalado en un barco. Los huéspedes pueden hasta saborear un delicioso frappuccino en el Starbucks que tiene en su interior mientras se dirigen a las Bahamas. Asimismo, contiene ocho vecindarios separados, en el que se incluye un vecindario de suites de lujo, e incluso cuenta con su propio “Central Park”, con más de 20.000 plantas vivas.
Para aquellos que quieran ver este espectáculo sobre el agua tendrán la oportunidad hasta las cinco de la tarde, que es cuando zarpa de aguas cartageneras rumbo a Málaga.
