Más de cinco mil personas se concentraron en una fiesta clandestina o 'rave' bajo la denominación 'big fucking party', ubicada en el circuito municipal de velocidad de Fuente Álamo. Foto: MARCIAL GUILLÉN (EFE)MURCIA (EP). El vicepresidente del Gobierno regional y consejero de Interior, Emergencias y Ordenación del Territorio, José Ángel Antelo, ha denunciado a la Delegación del Gobierno de la Región ante la Fiscalía por la macrofiesta ilegal ('rave') celebrada desde el 31 de diciembre al 5 de enero en el circuito de velocidad de Fuente Álamo.
La denuncia, según ha explicado el fiscal superior, José Luis Díaz Manzanera, en declaraciones a Onda Regional de Murcia (ORM) recogidas por Europa Press, va dirigida contra la Delegación del Gobierno en la Región de Murcia.
Díaz Manzanera ha confirmado que Antelo ha presentado la denuncia en calidad de vicepresidente de la Comunidad y, en ella, relata "una serie de extremos relacionados con esa fiesta supuestamente ilegal". "No le puedo decir más porque ha llegado esta mañana y eso lo vamos a estudiar para ver si, realmente, hay algún indicio de delito", ha apostillado.
En concreto, la denuncia apunta a la comisión de un presunto delito del deber de perseguir delitos y de otro contra el medio ambiente. "Eso es lo que aparece en la carátula inicial de la denuncia", según Díaz Manzanera. Ha remarcado que el fiscal decide si hay indicios de delito, continuando en tal caso con la investigación; o si no los hay, procediendo entonces a su archivo.
Cabe recordar que el pasado viernes, 5 de enero, Antelo suscribió dos requerimientos, uno destinado a la Delegación del Gobierno en la Región de Murcia y otro al Ayuntamiento de Fuente Álamo para proceder a la suspensión de la macrofiesta, que llegó a congregar a más de 8.000 personas durante la primera semana del año.
En ambos requerimientos, el vicepresidente solicitó la suspensión de las actividades conforme a lo dispuesto en el artículo 31 de la Ley 3/2023, de 5 de abril, de Emergencias y Protección Civil de la Región de Murcia.
Asimismo, el vicepresidente de la Región remarcó que, en base al artículo 36 del Sistema Nacional de Protección Civil, la Delegación del Gobierno "está obligada a cooperar con el Gobierno regional y no lo está haciendo".
Cabe recordar que durante la macrofiesta se han contabilizado más de 200 sanciones administrativas. Los efectivos de la especialidad de tráfico han emitido cincuenta y siete denuncias por pruebas de drogas y catorce por infracciones a la Ley de Seguridad Vial.
Por su parte, seguridad ciudadana ha registrado noventa sanciones por tenencia o consumo de drogas, catorce denuncias por infracciones a la Ley de Seguridad Vial, siete actas por tenencia o porte de armas, cuatro denuncias por desobediencia a agentes de la autoridad, una denuncia a la Ley de Extranjería y un detenido por tráfico de drogas. La Policía Local de Fuente Álamo ha confeccionado veinte denuncias administrativas por acampada en zona no habilitada.
Del mismo modo, un ciudadano de nacionalidad brasileña fue detenido por un presunto delito de tráfico de drogas tras incautarle 90 dosis de LSD cartón y 4.1 gramos de LSD líquido.
El pasado viernes acababa la fiesta, según informó la Delegación. El operativo coordinado por la Guardia Civil y la Policía Local de Fuente Álamo culminaba marcando el fin de la celebración. La música cesaba y el último escenario fue desmontado, lo que representó el cierre oficial del evento.
El pasado jueves, 504 vehículos abandonaron el recinto de manera escalonada. Actualmente, aunque el viernes quedaban menos de doscientos vehículos en el interior, si bien abandonaban el circuito siguiendo las indicaciones de los agentes.
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