Alcaraz despacha a Schwartzman en menos de hora y media y logra en Río su mayor triunfo

MURCIA. Brillantísimo campeón del ATP 500 de Río de Janeiro. Carlos Alcaraz Garfia ha logrado el que por ahora es el título más importante de su carrera como profesional del tenis y lo suma al ATP 250 de Umag, en Croacia, y al del torneo Next Gen ATP Finals disputado en la ciudad italiana de Milán, ambos el pasado año.

El joven tenista de El Palmar, de 18 años y que disputó el encuentro como jugador número 29 del mundo -este lunes aparecerá más arriba-, se impuso al argentino Diego Schwartzman, de 29 y decimocuarto en el ranking, por 6-4 y 6-2 en menos de una hora y media, concretamente en 86 minutos.

De este modo ha completado una semana sensacional con victorias ante el mallorquín Jaume Munar, el argentino Federico Delbonis, los italianos Matteo Berrettini, todo un top 6, y Fabio Fognini y el triunfo en la final frente a un Schwartzman al que empequeñeció. Han sido cinco partidos ganados y cediendo tan sólo dos sets en todos ellos para demostrar, como dijo antes de comenzar a jugar, que esta preparado para "hacer grandes cosas" en Río, donde por cierto inició su andadura en el circuito ATP World Tour en 2020 entonces con una invitación. Ahora es el campeón.

El choque comenzó mejor para el argentino, que ganó los dos primeros juegos, pero Alcaraz reaccionó de inmediato y recuperó el saque perdido anotándose también dos juegos seguidos. Con 2-2 cada jugador fue asegurando el servicio con bastante solvencia hasta el 4-4. En ese momento el español se apuntó el segundo "break" y a la primera que tuvo para cerrar el set lo hizo. El murciano, con un juego seguro y gustándose con las dejadas, cerró la primera manga con el 6-4 después de 44 minutos y un globo para irse a sentar con la satisfacción de estar haciendo bien el trabajo.

Y continuó igual en el segundo parcial pues lo inició rompiéndole nuevamente el saque a su oponente, pero no le dio continuidad al "break" porque Schwartzman, un hueso duro de roer, se recuperó para establecer el 1-1.

El set iba de rupturas y Alcaraz, a quien se le veía cómodo sobre la tierra batida del Jockey Club Brasileiro, volvió a salir airoso al resto y se disponía a servir para encarrilar aún más el triunfo. Lo hizo y no sólo eso sino que, además, volvió a conseguir otro "break” y en blanco para el 4-1 en un abrir y cerrar de ojos.

En Río se jugaba a lo que disponía "La Roca" por mucho que enfrente estuviera el número 14 del mundo y Carlos decidió acabar con la final por la vía rápida. De hecho ganó ocho de los diez últimos juegos del encuentro para llevarse el trofeo con un 6-2 en 42 minutos y con 59 puntos ganados, 19 más de los que logró su rival.

"Me siento increíble y estoy listo para estar entre los mejores del mundo", declaró Alcaraz tras su éxito. Viéndolo en la pista no cabe duda de ello.