Samantha Hudson: "Soy la madre de todos los maricones"

MURCIA. Si no conocen a Samantha Hudson, están a punto de hacerlo. Ya sea en sus redes sociales, con su podcast para Netflix o en televisión -próximamente será concursante de Masterchef Celebrity-, Samantha se ha convertido sin comerlo ni beberlo en una de las grandes revelaciones del ¿entretenimiento? Es difícil encasillarla en un compartimento y, quizá, esa es una clave de su éxito. Por lo pronto, protagoniza el espectáculo Eutanasia Deluxe -sí, han leído bien-, un show de variedades en el que, nos cuenta, acaba "acaba muerta". Eso hay que verlo.

-'Eutanasia Deluxe', como show, ¿tira más de Madonna o Lina Morgan?
-Lina Morgan no recuerdo haberlo dicho, aunque nos parecemos un poco. Ella siempre es referente, aunque dicen que era un poco mala, como Mari Carmen y sus muñecos. No sé, quizá los malos eran lo muñecos. En fin, que me voy por las ramas. Yo creo que mi influencia sobre todo ha sido Madonna, aunque ya me gustaría a mí hacer sus giras. Esto es como el Blond Ambition Tour pero venido a menos. En mi cabeza yo me creo una megaestrella, pero luego mantiene la esencia de los bajos fondos, que en realidad es por lo que la gente viene a verme. 

-Bueno, Madonna también empezó por algún lado, quién sabe si en unos años estás llenando estadios...
-¿Verdad? Madonna se viene a menos y Samantha Hudson se viene a más.

-Además vas a llevar el espectáculo a Valencia en el Día de la Madre.
-Es que yo soy la madre de todos los maricones. 

-El espectáculo tiene un punto muy fallero.
-¡Claro! Es una creación preciosa para luego quemarla. Me van a nombrar fallera mayor [ríe]

-Y que te inviten al balcón a ver la mascletá.
-¡A ver si me voy a caer otra vez!

-Entonces no. 
-Mejor me ponen en un bajo. 

-Me han pasado una nota de prensa que dice que eres "la chica de serie B más querida de España", ¿por qué crees que la gente conecta tanto contigo?
-Creo que en todas las generaciones hay una mujer que encarna la esencia de la contemporaneidad. Yo creo que, pecando de soberbia, ahora me ha tocado a mí [ríe] En realidad pienso que hay muy poca gente que haga las cosas más allá de un postureo de Instagram. ¿El discurso? Puede ser, aunque las cosas que digo en serio me dan bastante igual. Basta ya de obligar a la gente a tener discurso, yo lo que quiero ser es una chica tonta. 

-Lo de representar la contemporaneidad, ese zeitgeist, también tiene que ver con Madonna. 
-Hombre, claro. Es que Madonna ha representado todos los tiempos, ya desde Who's That Girl, donde era un poco una Cindy Lauper más pornográfica. Desde ahí se ha ido reinventando, porque no sé si sabes que cada vez que un maricón se fuma un cigarrillo ella gana un año de vida. 

-Hablemos de música. Estás preparando un álbum, ¿cómo va a ser ese proyecto a gran escala? 
-En realidad no es tan a gran escala, porque empecé construyendo la casa por el tejado publicando Los grandes éxitos de Samantha Hudson (2019), así que ahora hay que invertir la ruleta. En el próximo álbum cada canción va a ser de su padre y de su madre, no es para nada conceptual. Lo mismo un merengue que una canción techno. Lo que sí es cierto es que la producción va a ser genial, la mayoría las ha hecho Putochinomaricón y Adrià Arbona, así que ya te puedes imaginar. El próximo single es una colaboración con La Prohibida, pero eso ya os lo iré contando. 

"Estaba ya fatigadita de tantos maricones enseñando el pene en Twitter"

-En 'Dulce y bautizada' hablas sobre el sexo, sobre su sobreexposición... o todo lo contrario.
-En realidad es un poco las dos cosas. El videoclip trata -si es que hablar de este vídeo de forma seria está permitido, porque es un cachondeo- no tanto de posicionarme en contra del sexo, pero sí de hablar de la hipersexualización y de que la gente siga un esquema sin haberse planteado antes si le corresponde. Creo que cada uno tiene que escuchar su ritmo. Si tienes una libido desenfrenada, folla mucho, pero me niego a pensar que todo el mundo siente ese deseo. Es imposible que todas seamos unas cock destroyers. Estaba ya fatigadita de tantos maricones enseñando el pene en Twitter. Y mira que soy la reencarnación de Susana Estrada, aunque eso no quita que sea una carmelita descalza [...] Los discursos van cambiando dependiendo de las circunstancias y creo que en los tiempos que corren ni el cruising es un acto de revolución ni mostrarse hipersexualizada supone un acto de liberación. 

-¿Por qué enfada tanto (a ciertos sectores) el debate sobre género? 
-Hay dos factores importantes, uno político y otro personal. El personal es que la gente no tolera no tener el control de la situación. Es un proceso muy difícil afrontar que estás equivocada. Han vivido tan encerrados en su burbuja de pensamientos retrógrados que lanzar la pregunta sobre qué es ser mujer y qué es ser hombre es algo que, sencillamente, no pueden procesar. Yo creo que la mayoría de gente de derechas no conoce ni una persona trans. Es evidente que es mucho más fácil negarlo y decir que somos enfermos, que es una conspiración. Sobre el factor político, el sistema se sustenta en tener un control de la población, en que la gente se piense que hay una manera correcta y estandarizada de actuar. Cuando alguien es disidente está poniendo en evidencia que el sistema tiene fallos. Se genera homofobia y misoginia para que todo siga su cauce y nadie rompa esta dinámica y estructura de poder. 

"Cuando alguien es disidente está poniendo en evidencia que el sistema tiene fallos"

-¿Cómo se vive esa transición del underground a tener cada vez más presencia en espacios del mainstream? 
-Es una mezcla entre ilusión y temor. En el underground se está más cómoda, puedes hacer comentarios más desinhibidos sobre los ricos o el capitalismo. De repente empezar a formar parte de esos circuitos sustentados por esas personas que criticas hace que te sientas contradictoria o, incluso, hipócrita. En cualquier caso, creo que es importante seguir conquistando espacios mainstream para que la gente tenga contacto con esta realidad. 

-Uno de esos espacios es el fichaje por Masterchef Celebrity, ¿estás cocinando en casa?
-La verdad es que no [ríe] No puedo decir mucho más. Pero, vamos, que yo estoy meada de la risa porque es una situación de meme. Va a ser una aparición estelar. 

-Una duda que tiene todo el mundo, ¿Samantha Vallejo-Nágera te va a devolver la peluca? 
-En realidad ya me la devolvieron, algo que nunca aclaré en el vídeo.

-¡Misterio resuelto!
-Se ha generado una especie de leyenda urbana que dice que Samantha sigue teniendo mi peluca, pero me la devolvieron a la semana y la tiré porque estaba asquerosa. 

-Siempre dices que tienes la mejor prensa. ¿Qué titular te gustaría que tuviera esta entrevista? 
-Si lo elijo yo no tiene gracia. Coge la frase más absurda, la descontextualizas completamente y estoy seguro de que será fantástico.