MURCIA. La pandemia es como un tsunami que va arrasando con todo lo que pilla a su paso. Y el pequeño comercio es el siguiente damnificado entre los sectores que están viendo como sus negocios se hunden tras el paso de esa inmensa tercera ola. Según cálculos de Coremur, la Federación de Comercio de la Región de Murcia, entre un 15% y un 20% de los comercios regionales, que ascienden a unos 22.000, ya se han visto abocados a echar la persiana. Eso arroja una cifra que oscila entre los 3.300 y los 4.400 comercios. Y la previsión que hacen para este año no es mejor, ya que estiman que los negocios abocados al cierre podrían llegar al 40%.
"Sí, necesitamos un plan de rescate. Según va esto, no nos va a quedar más remedio si queremos sobrevivir", apunta Carmen Piñero, presidenta de Coremur. "Estamos analizando el desarrollo de las Navidades, de las rebajas y de las restricciones, para ver realmente el alcance de los perjuicios y valorar lo que necesitamos para salir adelante".
Precisamente este lunes el Comité de Seguimiento Covid anunciaba nuevas medidas restrictivas que les afectan directamente con el adelanto de la hora de cierre para todos los comercios no esenciales a las ocho de la tarde. El fin de las nuevas restricciones puestas en marcha por el Gobierno regional es limitar los contactos sociales y, con ello, la expansión del virus. Algo que, a juicio de Piñero, no sucede en los comercios de proximidad. "Nunca se va a contagiar nadie en un pequeño comercio. La seguridad es total, es como si estuvieras en tu casa. Se cuida hasta el más mínimo detalle", subraya.
Debido a la situación actual y las nuevas restricciones, el sector teme quedar reducido a la mínima expresión como consecuencia de la tercera ola. "El consumo está por los suelos y no tenemos ya de donde tirar. Estamos en una situación de mucho riesgo. Y comprar en el pequeño comercio es lo más seguro que hay, con profesionales, con precio, con buen productos", asegura.
Sobre la nueva hora de cierre estima que en este momento no supondrá un gran cambio ya que el cierre de la hostelería ha condicionado sus ventas y las tardes tienen muy poca actividad, por lo que la mayor parte de los comercios ha adelantado la hora de cierre a las ocho. No obstante, valora "que adelantar el cierre de los comercios no va a afectar en nada en el incide de contagios", apunta.
El comercio minorista representa el 12,5% del PIB y, tal como defiende Piñero, tiene un gran impacto en la vertebración de las ciudades y en el empleo. "Cuando contratamos a alguien, suelen ser contratos estables e indefinidos", indica. Por eso defiende un plan de recate que sostenga los negocios porque "si el comercio minorista no sobrevive, nuestra economía se hunde".
Piñero también se ha mostrado en contra de la propuesta lanzada desde un comercio del área de Murcia Centro de cerrar los comercios a las cuatro de la tarde.
"Estamos totalmente en contra, por el fondo y por las formas. Erigirse en representante de todo el comercio de Murcia no nos ha parecido acertado", recalca. "El pequeño comercio no es foco de contagios y no vemos justificable ni con sentido un cierre a las cuatro".
Asimismo, ha recordado que en la Región "tenemos una federación, Coremur, y unas comisiones de comercio que son los lugares para debatir estas cosas y desde donde realizar las propuestas si procede".
La Consejería de Empresa ha habilitado algunas líneas de ayuda al sector, aunque no lo consideran suficiente dada la gravedad de la situación. Así, destinaron 900.000 euros al desarrollo de acciones para impulsar el comercio local en los 45 municipios de la Región a través de una línea de ayudas a los ayuntamientos.
Las subvenciones, que oscilan entre los 3.000 y 97.000 euros, según el criterio de población, tienen como objetivo promocionar, dinamizar y reactivar los comercios de la Región debido a la situación excepcional que estos atraviesan a consecuencia de la crisis sanitaria provocada por la pandemia de covid-19.
Además, se han lanzado ayudas por un importe total de 230.000 euros para federaciones y asociaciones de comerciantes que promocionen el comercio local que alcanzan hasta 6.000 euros por entidad beneficiaria.
