MURCIA. La Confederación Regional de Empresarios (Croem) celebró la tarde de este jueves la última Junta Directiva del año que su presidente, José María Albarracín, calificó de "agridulce" debido principalmente a dos asuntos. Por un lado, la "satisfacción" por la sentencia del Tribunal Constitucional dando luz verde a la Ley de Aceleración Empresarial. Por otro, el malestar por el cierre del trasvase Tajo-Segura que deja a los regantes del Levante sin agua.
"Estamos satisfechos, es un momento de felicidad", señaló sobre la sentencia que se hizo pública este miércoles y que tanto afecta al sector empresarial. "Tenemos que seguir trabajando en esa línea y que la tercera y definitiva ley de simplificación administrativa sea una realidad en 2020".
En ese sentido, indicó que la ley incluirá un instituto de medioambiente y que lo importante es "que sea capaz de agilizar al máximo la tramitación de expedientes" de ampliación y apertura de empresas. "Estamos seguros de que cuando lo tengamos, la Región de Murcia va a ser un polo de atracción todavía mayor de lo que lo es ahora".
La parte agria, recalcó, es el cierre del trasvase Tajo-Segura, "una irresponsabilidad". "La ministra lo ha hecho de forma unilateral, sin tener en cuenta los informes técnicos. Vamos a estar con nuestros regantes, agricultores y sector agroalimentario. Nuestro apoyo es absoluto para revertir esa ley".
También se refirió a la reconstrucción de la federación de comercio, en la que aseguró "estamos trabajando para que sea una realidad lo antes posible y cubra las necesidades de ese sector".
La cita fue clausurada por el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, que también destacó que la sentencia del Tribunal Constitucional "ratifica que la Región cuenta desde 2018 con una de las leyes más avanzadas de España en materia de simplificación, lo que supone un impulso definitivo a la actividad empresarial generadora de riqueza y empleo”.
